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JEFATURA DE INFORMACIÓN
BOLETÍN DE PRENSA
EN LA REUNIÓN MINISTERIAL QUE SOSTENDRÁN MEXICO,
EE.UU Y CANADÁ, ESTE LUNES EN OTAWA, SOBRE EL TLCAN-PLUS
(ASPAN) SE BUSCARÁ ACORDAR UNA ILEGITIMA LISTA DE ENTREGAS
DE LA SOBERANÍA DE NUESTRO PAÍS.
En la mesa de Ottawa, Canadá: Que el espacio aéreo,
los aeropuertos, las fronteras y el mar territorial de América
del Norte estén bajo el control de EE.UU, bajo el pretexto
de la guerra contra el terrorismo.
Con la Alianza para la Seguridad y la Prosperidad para América
del Norte, Estados Unidos está llevando a Canadá y
México a firmar acuerdos supranacionales que solo benefician
al gobierno de Washington, regionalizando sus políticas de
seguridad estratégica, que implican; la profundización
del mercado comercial, la lucha contra el terrorismo y la insurgencia,
así como el abasto de recursos energéticos.
Lo anterior fue señalado por el Dr. Juan Manuel Sandoval,
experto del Seminario Permanente de Estudios Chicanos y de Fronteras,
en Conferencia de Prensa, Sandoval añadió que Estados
Unidos busca mediante esta Alianza (ASPAN) que su propia seguridad
nacional sea prioridad de los tres países y que México
y Canadá acepten que el espacio aéreo, los aeropuertos,
las fronteras y el mar territorial de América del Norte estén
bajo el control de EEUU, bajo el pretexto de la guerra contra el
terrorismo.
Por otro lado, Alejandro Villamar, de la Red Mexicana de Acción
frente al Libre Comercio (RMALC) puso énfasis en el hecho
de que el Ejecutivo está avanzando en la concreción
de éstos acuerdos, por lo que existe inconstitucionalidad
al reducir aranceles y modificar reglas de origen sin tomar en cuenta
al Congreso de la Unión.
Alejandro Villamar detalló que es facultad exclusiva del
Congreso de la Unión establecer o modificar- impuestos al
comercio exterior (Fracción XXIX del Artículo 73 Constitucional
sobre las facultades del Congreso) y el Ejecutivo puede, según
la Ley de Comercio Exterior: “ Crear, aumentar, disminuir
o suprimir aranceles, mediante decretos publicados en el Diario
Oficial de la Federación, de conformidad con lo establecido
en el artículo 131 de la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos”
Por consiguiente, cualquier pretensión de establecer acuerdos
o “agendar” una modificación de reducción
de aranceles o reglas de origen, incluso con el rechazo de numerosos
empresarios mexicanos, sociedad civil de distintos sectores, especialmente
agrícola, carece de legitimidad y probablemente de legalidad.
En tanto, el Congreso cumpla no solo con sus facultades, sino sus
obligaciones de defender la Constitución y los intereses
de los mexicanos.
El problema es que este Ejecutivo “del cambio” sigue
actuando igual en materia de comercio exterior que los anteriores
presidentes priístas: violentando el espíritu y la
norma constitucional, afirmó Alejando Villamar, analista
de la RMALC.
En su momento, Ramón Aceves, del Sindicato Mexicano de Electricistas,
mencionó que la energía es un punto central en los
contenidos de la ASPAN o TLCAN-Plus, ya que Estados Unidos busca
asegurar mediante esta alianza, su control sobre las reservas de
petróleo y gas de México y Canadá que están
entre las principales del mundo.
Al referirse a la energía eléctrica, Aceves aseguró
que a través del TLCAN-Plus (ASPAN) el gobierno de Bush buscará
que las empresas eléctricas estadunidesnse tengan un mayor
posicionamiento en el sector eléctrico mexicano, particularmente
en lo que se refiere a fuentes alternas como la hidro y eolo-electricidad,
aprovechando las debilidades tecnológicas y financieras de
México. Por lo que urge que México desarrolle su propia
tecnología sin modificar el marco jurídico constitucional.
Martín Velázquez, de la Alianza Mexicana por la Autodeterminación
de los Pueblos, externó la preocupación que tienen
las organizaciones campesinas, indígenas y de derechos humanos,
por la amenaza que representa la administración de Washington,
quien busca legitimar con acuerdos como la ASPAN o TLCAN-Plus el
manejo de la economía mexicana, según convenga a sus
intereses y en detrimento de nuestra soberanía, vida y cultura
de los pueblos.
Una prueba de ello, dijo, es evidentemente la crisis que vive el
campo mexicano y la creciente migración de comunidades enteras.
Así como el uso y explotación por las empresas transnacionales,
de nuestros recursos bióticos –ecosistemas completos-
y la importación de productos, como la carne contaminada,
sin una legislación efectiva que lo evite.
Por su parte, Jorge Robles, quién participó en la
Conferencia de prensa por el Frente Auténtico del Trabajo,
denunció como una farsa la “consulta” electrónica
que la cancillería mexicana hiciera a algunas organizaciones
civiles, sobre la ASPAN, ya que no hay información suficiente,
mecanismos de intercambio y garantías de ser tomadas en cuenta,
sobre todo considerando que la sociedad se ha manifestado masivamente
en contra, durante más de diez años, y no ha sido
escuchada.
Robles, agregó que organizaciones sociales y civiles de
México, Canadá y Estados Unidos seguirán trabajando
para exigir a sus gobiernos que se ciñan al marco constitucional
y que abran a consulta pública los contenidos de una Alianza
tan nociva para la soberanía y calidad de vida de nuestros
pueblos.